Arrugas | Tipos y Cuidados | Cremas, Medicina Estética, Suplementos

Introducción

Las arrugas son los signos típicos del envejecimiento cutáneo.

Constituyen la consecuencia directa de un deterioro de las características físicas de la piel (como la pérdida de elasticidad, hidratación, densidad y grosor), y están relacionadas con dos tipos de envejecimiento:

• Interno o cronológico (inducido por factores biológicos predeterminados genéticamente, como los cambios hormonales ligados al proceso de envejecimiento).
• Externo o extrínseco (debido a factores ambientales como la dieta, el tabaquismo y las radiaciones ultravioletas).

Desde el punto de vista histológico, las arrugas consisten en surcos lineales permanentes en la piel de profundidad variable.

Estos surcos se encuentran, preferentemente, en ciertas regiones típicas del rostro. Por ello, existen tipos de arrugas que son recurrentes en distintas personas.

En este sentido, se pueden reconocer:

• arrugas frontales, en sentido transversal, presentes en toda la frente;
• arrugas glabelares verticales y horizontales, presentes en la raíz de la nariz y entre las cejas;
• arrugas perioculares, más conocidas como patas de gallo;
• arrugas de las mejillas;
• arrugas nasogenianas, surcos más o menos profundos en sentido oblicuo, que suelen ir de la fosa nasal a la comisura del labio correspondiente;
• arrugas perilabiales, extendidas alrededor de los labios;
• arrugas labiogenianas, generalmente, presentes a la altura del labio inferior;
• arrugas transversales del cuello.

Arrugas de Expresión

Las arrugas de expresión son los surcos que, generalmente, aparecen en la región de inserción de los músculos faciales.

Están relacionadas con la expresión facial normal y, por eso, también se conocen como arrugas mímicas o musculodinámicas.

Es decir, son las mismas que desaparecen tras utilizar la toxina botulínica como remedio antiedad, dando lugar a cierta inexpresividad del rostro tratado.

Por la tanto, aunque son progresivamente más evidentes con la edad, las arrugas de expresión ya aparecen en la juventud y aportan al rostro su expresividad natural.

Arrugas gravitacionales

Estas arrugas se forman por la acción de la fuerza de la gravedad en un cutis que, poco a poco, ha perdido tonicidad y elasticidad.

Inevitablemente, se acentúan con la edad como resultado de los cambios estructurales que sufre el cutis.

La pérdida gradual de tono muscular, la reabsorción adiposa y ósea y el deterioro paulatino de la estructura de la dermis (con pérdida progresiva de colágeno y de fibras elásticas) contribuyen, en gran medida, a la pérdida de tonicidad en el tercio medio e inferior del rostro.

Todo esto conlleva la aparición de arrugas visibles a la altura de la boca, del mentón, de la mandíbula y del cuello, además de las arrugas de expresión que se acentúan progresivamente.

Las arrugas gravitacionales típicas son:

• las arrugas que se forman en la región periocular, es decir, las famosas bolsas;
• la caída progresiva (ptosis) de la ceja;
• la flacidez de la piel de la mandíbula (habitualmente conocida como la papada).

Arrugas Actínicas

Las arrugas actínicas son surcos sutiles, rugosidades finas y difusas que suelen aparecer a partir de los 30-40 años, sobre todo, en los fototipos más claros.

El tejido afectado se arruga de forma gradual, como un pergamino, hasta estar completamente arrugado a una edad avanzada.

Estos signos están claramente relacionados con el fotoenvejecimiento, es decir, con la acción dañina provocada por las radiaciones ultravioletas en las estructuras de la piel.

Más concretamente, el daño oxidativo que sigue a dicha exposición podría dañar tanto la estructura normal de la dermis, como la vitalidad de las células presentes en este tejido, reduciendo significativamente la posibilidad de recuperación estructural del cutis dañado.

Precisamente por su naturaleza, estas arrugas aparecen principalmente en las regiones más expuestas, como los pómulos y las mejillas, dando al cutis un aspecto envejecido típico.

Arrugas del Sueño

Generalmente, estos signos están presentes en un solo lado del rostro.

Las arrugas del sueño son reversibles inicialmente y, de forma gradual, tienden a hacerse permanentes con la pérdida de la elasticidad cutánea normal.

Por lo general, son poco relevantes desde el punto de vista médico-estético, aunque en algunos casos (sobre todo en las pieles más envejecidas) pueden ser motivo de imperfecciones estéticas desagradables.

Evolución de las Arrugas

Aunque diferentes factores (como la predisposición genética, el estilo de vida, la edad y la exposición a factores favorables) pueden influir en la aparición de las arrugas, el envejecimiento de la piel es un proceso gradual que, con tiempos diferentes, sigue varios pasos.

Estos pasos se interpretan en la conocida clasificación de Glogau.

1. Inicialmente, en la juventud (alrededor de los 20-30 años), el rostro se presenta sin surcos ni decoloración, y con arrugas pequeñas y arrugas de expresión superficiales que no alteran la armonía normal (Tipo I de Glogau).
2. Con el paso de los años, y como consecuencia de la acción de fotoenvejecimiento de la radiación UV, pueden aparecer pecas, queratosis palpable, líneas de la sonrisa y arrugas de expresión que se van haciendo más evidentes (Tipo II de Glogau).
3. En torno a los 50 años, el fotoenvejecimiento ya está avanzado y las decoloraciones y las telangiectasias (dilataciones de pequeños vasos sanguíneos) son visibles, al igual que la queratosis. Las arrugas aparecen incluso en reposo y suelen alterar el perfil y la expresividad normales del rostro (Tipo III de Glogau).
4. Al final, a una edad avanzada, pasados los 65 años, la piel aparece completamente arrugada, con decoloraciones (amarillenta) y potencialmente propensa a lesiones malignas (Tipo IV de Glogau).

Cuidados y Tratamientos

Cosméticos

A continuación, se muestra una tabla con una visión general de los distintos ingredientes que suelen encontrarse en las cremas antiarrugas, agrupados en función del signo del envejecimiento sobre el que actúan.

Suplementos Antiarrugas

Los suplementos antiarrugas son productos que se ingieren por vía oral para «nutrir y proteger» la piel desde el interior.

Se basan en el aporte de:

• antioxidantes: sustancias capaces de neutralizar el exceso de radicales libres;
• colágeno, péptidos y ácido hialurónico: aportan las sustancias nutritivas necesarias para el metabolismo cutáneo;
• extractos vegetales de acción bioestimulante (por ejemplo, equinácea, centella, isoflavonas, cacao, té verde): estimulan la actividad metabólica de las células de la dermis (los fibroblastos).

Para más información, lea nuestro estudio sobre los suplementos antiarrugas.

Un Consejo de Belleza

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Botulinum

Se utiliza para reducir la expresión de los músculos faciales, responsables de las arrugas de expresión.

El médico inyecta la toxina botulínica en puntos concretos del rostro y en cantidades muy pequeñas.

Al inhibir la liberación del neurotransmisor acetilcolina, la toxina induce la relajación de la musculatura facial y, como resultado, alisa las arrugas.

El efecto se mantiene durante algunos meses, después disminuye y requiere una nueva inyección para recuperar el efecto de relajación.

Peelings químicos medios y profundos

Utilizan sustancias químicas que exfolian y regeneran el cutis. El resultado es un proceso inflamatorio que estimula la renovación cutánea y la síntesis de colágeno.

Los peelings pueden ser superficiales, medios o profundos, dependiendo de si actúan solo en la epidermis o en la dermis superficial o media, respectivamente.

Los médicos pueden utilizar alfahidroxiácidos (como el ácido glicólico), ácido salicílico, ácido retinoico (tretinoína) y ATC (ácido tricloroacético), en mayor o menor concentración, en función del tipo de peeling.

Cuanto más agresiva sea la sustancia, mejores serán los resultados, pero también serán mayores los efectos secundarios (enrojecimientos, costras, edemas) y su duración.

Relleno

Se basa en la inyección de sustancias para rellenar los surcos de la piel y perfilar los rasgos faciales (labios, nariz, pómulos…).

En función del tipo, se utilizan sustancias de origen biológico o sintético que se aplican mediante inyecciones transcutáneas.

En general, se prefieren los rellenos reabsorbibles no permanentes (como el ácido hialurónico), debido a su inocuidad y manejabilidad, y a la naturalidad del resultado estético.

En función de la alteración estética a tratar (arrugas más o menos sutiles, pérdida de volumen, etc.) se elegirá la sustancia más adecuada para inyectar.

Biorrevitalización / Bioestimulación

La biorrevitalización prevé la inyección de principios activos con un efecto biológico «curativo».

La solución inyectada puede incluir vitaminas, aminoácidos, minerales, conenzimas y ácidos nucleicos, péptidos y fragmentos de ácido hialurónico.

El objetivo es estimular la regeneración de la piel proporcionándole los estímulos y sustratos adecuados.

Lipofilling

Consiste en la retirada de pequeñas cantidades de grasa del paciente (abdomen o muslos) para después inyectarlas como relleno en zonas concretas del rostro.

Radiofrecuencia

Utiliza la generación de campos electromagnéticos (CEM) para afectar directa o indirectamente a las células de la piel (en particular, los fibroblastos).

Transmite una energía a los tejidos que desprende calor. Este libera mediadores químicos en la dermis que provocan la remodelación del colágeno y la neoformación de nuevo colágeno.

Un consejo de belleza

X115^® ACE es un sérum facial de nueva generación que aporta las vitaminas de la belleza en estado más puro y eficaz.

Contiene complejos vitamínicos de nueva generación, altamente concentrados, dentro de la tapa del frasco y separados del compuesto activador.

Desenroscando el tapón, las vitaminas se integran a los potenciadores vehiculantes e iluminadores, para un tratamiento de máximo nivel.

Luz pulsada (IPL)

Los sistemas de luz pulsada emiten un haz de luz policromático (luz de flash) que puede ajustarse en función de la alteración estética a tratar.

En el caso de las arrugas, el fotorrejuvenecimiento con luz pulsada genera un calor controlado en los estratos profundos de la piel, estimulando los fibroblastos de la dermis y, como consecuencia, produciendo y remodelando el colágeno y la elastina.

Láser

El láser (Light Amplification by Stimulation of Radiation) utiliza luces monocromáticas, coherentes y colimadas.

La luz láser calienta los estratos profundos de la piel y estimula la síntesis de colágeno y otros componentes de la matriz.